El síndrome facetario o enfermedad de las facetases una patología que afecta a las articulaciones que hacen la función de conectar y proteger las vértebras de la columna. A continuación, todo lo que necesitas saber al respecto:
- ¿Qué es el síndrome facetario?
- ¿Qué síntomas tiene?
- Diagnóstico
- Tratamiento aplicado
¿Qué es el síndrome facetario?
Lo primero que debes saber es que en las vértebras existen unas articulaciones, llamadas facetas, que hacen la función de protegerlas, estabilizándolas, mejorando su movilidad e impidiendo el roce. Cuando estas facetas pierden consistencia o volumen, la fricción aumenta y se produce un intenso dolor.
Este dolor se produce por la degradación de estas articulaciones y su lógica irritación. A esto se lo conoce como síndrome facetario.
¿Por qué surge?
La aparición del síndrome facetario se debe en gran parte a la edad y a la degradación progresiva que van sufriendo tanto las articulaciones, como los músculos y huesos de la espalda y la zona lumbar.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome facetario?
Como venimos diciendo, el síntoma principal es el dolor lumbar y zona baja de la columna. Este dolor se extiende con considerable normalidad hacia los glúteos y las piernas.
De esta forma, cuando una persona siente este tipo de dolor y lo padece principalmente cuando está demasiado tiempo de pie, deberá acudir a un especialista a que le diagnostique un tratamiento para el síndrome facetario.
El dolor se acrecienta sobre todo con movimientos de inclinación o rotación de la cadera, ya que es en ese tipo de gestos cuando las vértebras sufren una mayor irritación por el roce.
Además de este característico dolor, el síndrome facetario tiene otros síntomas como por ejemplo:
- Inflamación de algunas articulaciones
- Dolor y dificultad para inclinar el torso hacia delante
- Molestias considerables al girar el cuello a los lados
- Rigidez continuada tras largos tiempos de reposo
¿Cómo se diagnostica?
Cuando un paciente acude a nuestra clínica Vitruvio, además de analizar los síntomas que hemos detallado anteriormente, realizaremos distintas pruebas para determinar el grado de gravedad de patología y las zonas afectadas.
Entre las principales pruebas, las más efectivas son las de imagen como las radiografías o las resonancias magnéticas.
¿Qué tratamiento se aplica para el síndrome facetario?
En Vitruvio, variamos el tratamiento en función de la gravedad de la patología. Esta estará determinada por el deterioro de las articulaciones y las facetas.
El tratamiento más amable y menos invasivo consiste en técnicas manuales de fisioterapia para forzar el mejor posicionamiento de las vértebras para evitar el roce y la irritación. A este tratamiento, se le suman algunos ejercicios que recomendamos para fortalecer la zona, aliviar el dolor y prevenir de un aumento de la gravedad de la patología.
En caso de que el síndrome facetario esté más extendido y sea más grave, el tratamiento pasará a ser más intenso y más invasivo. Este consiste en aplicar técnicas para adormecer las fibras nerviosas de las facetas y evitar el dolor.
Esto suele ir acompañado de recetar la infiltración de cortisona en estas articulaciones. No obstante, es un tipo de tratamiento bastante invasivo y solo está recomendado para casos muy concretos donde los tratamientos más leves hayan fracasado.